domingo, 1 de agosto de 2021

Cárceles llenas de “presuntos inocentes”

"Para que proceda una condena firma son necesarias dos sentencias sucesivas de condena, pero para absolver a un imputado basta una sola sentencia absolutoria.

La ciudadanía, en el 2020, logró detener la liberación de presos saliendo a sus balcones con sus cacerolas. Pero la carrera abolicionista de la (in)Justicia busca siempre otras vías alternativas para liberar a asesinos y violadores. Es cierto, las cárceles no alcanzan, y menos aún las comisarías que no deberían albergar a presos. Entre otras razones, no alcanzan porque no se construyen cárceles y porque cada vez hay más delincuentes que ingresan en los pabellones.

Este crecimiento carcelario, para alguien desprevenido, puede resultar sorprendente. ¿Cómo puede haber más presos en un sistema abolicionista como es el argentino?

La respuesta radica en un artilugio jurídico: Antes de la irrupción del abolicionismo penal, la doble instancia que manda los tratados internacionales permitía que la sentencia inicial pudiera ser apelada, usualmente por cualquiera de las partes, ante un tribunal superior que podía revisarla.

Pero se metamorfoseó y en virtud de una interpretación falaz, hoy se aplica el “doble conforme”, una garantía imputado y una falta de equidad cuyo chivo expiatorio es la víctima: para que proceda una condena firme son necesarias dos sentencias sucesivas de condena, pero para absolver a un imputado basta una sola sentencia absolutoria.

La garantía del “doble conforme” no rige para los derechos de las personas víctimas. Efecto de ese dislate de nuestro sistema jurídico es que convivimos con cárceles llenas de presuntos inocentes porque, con semejante embudo, “nadie es culpable”, y cada preso apela a la instancia superior hasta que finalmente es sobreseído o prescribe la pena. Este artilugio jurídico es funcional al abolicionismo pues permite que el buenismo cultivado en nuestras tierras proteste diciendo que las jaulas (sic) están llenas de inocentes."

Clarín

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Entradas populares