El portavoz presidencial, Manuel Adorni, anunció la eliminación de fondos fiduciarios por un valor de 2 mil millones de dólares durante una conferencia de prensa en la Casa Rosada. Este ajuste representa aproximadamente medio punto del Producto Bruto Interno, según indicó Adorni. La decisión surge de la percepción de falta de transparencia y la consideración de que estos fondos son parte de las prácticas opacas en la política, según expresó el vocero.
Esta medida, previamente anunciada por el presidente Javier Milei en diversas entrevistas, estaba inicialmente contemplada en la Ley Bases, la cual no logró avanzar en el Congreso tras la retirada del proyecto por parte del Ejecutivo.
Durante el debate legislativo, los gobernadores y otros sectores se opusieron al inciso "h" del artículo 4° del proyecto, que otorgaba al presidente la facultad de modificar o eliminar asignaciones específicas, fideicomisos o fondos fiduciarios públicos. Esta oposición condujo a la retirada del proyecto y ahora el Poder Ejecutivo planea avanzar mediante un decreto. No se proporcionaron detalles específicos sobre qué fondos fiduciarios serán eliminados en esta primera fase.
En cuanto al concepto de fideicomiso, se explicó técnicamente como un instrumento legal que involucra a tres partes clave: el fideicomitente, el fiduciario y el beneficiario. Este mecanismo separa la propiedad legal de los activos de su control económico y beneficio, siendo utilizado para gestionar fondos públicos. Sin embargo, algunos críticos argumentan que los fondos fiduciarios carecen de los controles y la transparencia presentes en las partidas del Presupuesto aprobadas por el Congreso y auditadas regularmente.
En la práctica, los fondos fiduciarios afectan presupuestos provinciales, generando desacuerdo entre algunos gobernadores y sectores, como en el caso del Fondo de Integración Socio Urbana (FISU), cuya eliminación es cuestionada por organizaciones piqueteras y movimientos sociales peronistas.
Javier Milei, por su parte, destacó que la caída de la Ley Bases en el parlamento le impidió manejar los fondos distribuidos a través de 29 fideicomisos, considerándolos como parte de una "caja negra" sin controles adecuados. Anunció la eliminación de los fideicomisos mediante un decreto, señalando que estos fondos fueron la principal razón por la que no se lograron los votos para la aprobación de la ley.
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