En 1810 la primera Junta de Gobierno, el 29 de Mayo, dio nacimiento formal al Ejército Argentino. De esta forma las tropas militares durante el proceso revolucionario fueron reconocidas marcando así un hecho clave de la historia militar de la República Argentina.
De esta forma esta fecha es elegida "para saludar a sus integrantes y honrar la memoria de aquellos caídos en defensa de la patria".
Actualmente frente a la pandemia de COVID-19 el Ejercito Argentino mediante las Unidades Militares de Respuesta a la Emergencia está dando respuesta para la protección a los habitantes de la República.
En un contexto político difuso y complejo, dado que el propio comandante de las Fuerzas Armadas, Agustín Rossi, niega el derecho de los integrantes de las Fuerzas Armadas a conformar una asociación denominada "Mesa de Encuentro Libertador General San Martín" manifestando de forma injuriante que dichos integrantes buscan "conspirar".
Según las manifestaciones de los medios periodísticos el personal de las Fuerzas Armadas suelen trabajar en condicione muy magras, tal la nota en Clarín de Junio de 2020, "El nuevo rol de las Fuerzas Armadas, La otra cara de la ayuda social: los militares que brindan asistencia también son pobres".
Situación similar surge en fuerzas policiales y de seguridad donde son relegados frente a la provisión de vacunas contra el COVID tal describió las nota más reciente de Infobae "Las fuerzas de seguridad fueron relegadas en el calendario de inmunización contra el COVID y 149 uniformados murieron por la enfermedad".
Mientras el personal sin las vacunas y con sueldos magros sigue cumpliendo su rol tanto de seguridad como de defensa, los ministros de dichos organismos (Sabina Frederic de Seguridad, y Agustín Rossi en Defensa) aseguran que las vacunas ya llegarán.
Sin embargo solo llegaron para los Vacunados VIP, ligados al poder y negado a las personas que están día a día combatiendo la pandemia.
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