Osvaldo Rofrano, un reconocido empresario de 63 años, fue encontrado muerto el jueves por la tarde en la piscina de su domicilio en el barrio privado Las Candelas, ubicado en Luján de Cuyo, Mendoza. El cuerpo fue hallado por su esposa, quien alertó a las autoridades a través de un llamado al 911.
La fiscal Andrea Lazo está a cargo de la investigación y ya ha ordenado las primeras medidas, incluyendo una autopsia realizada por el Cuerpo Médico Forense. Según fuentes policiales y judiciales, la hipótesis principal es el suicidio, a pesar de que Rofrano tenía precintos en sus manos. Su esposa también afirmó que él se había quitado la vida. No obstante, no se encontraron evidencias de la presencia de terceros en la casa.
Días antes de su muerte, Rofrano había denunciado amenazas a través de una publicación en la red social X, afirmando que no tenía intención de suicidarse y responsabilizando a "mafiosos líderes narco y trata" por cualquier daño que pudiera ocurrirle a él o a su familia. La autopsia y el análisis de las cámaras de seguridad serán clave para esclarecer el caso.
En una entrevista realizada en 2021, Rofrano reveló que en 2012 había recibido una llamada de Guillermo Moreno, un influyente funcionario kirchnerista, solicitándole coimas para participar en el desarrollo de su empresa, Gases Aconcagua S.A. Rofrano denunció un alto nivel de corrupción y expresó su resistencia a ceder a las presiones.
La Justicia provincial continúa con la investigación para determinar las causas exactas de la muerte de Rofrano, mientras el expediente se mantiene bajo la carátula de averiguación de causales de muerte.
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